Desde la marca Los Molinos, reivindicamos la comida familiar, las tradiciones y nuestra gastromonia. Es por eso que en estas fechas, no nos podemos olvidar del postre más famoso de la Semana Santa, las torrijas.
Como ya sabeis, las más elaboradas son las de leche o las de vino. Pero cada vez la gastronomia innova hacia recetas mas originales. Con chocolate y naranja, rellenas de dulce de leche o frambuesa, incluso con frutos secos y miel.
Aunque todas estas variedades son deliciosas, los amantes del vino y lo tradicional elegimos las torrijas al vino. Los Molinos Tempranillo, gracias a su equilibrio y suavidad y a sus taninos dulces, también es el elegido perfecto para elaborar este postre.
INGREDIENTES:
- 1 botella de Los Molinos Tempranillo
- 400 ml de agua
- 200 gr de azúcar
- 1 rama de canela
- La rayadura de 1 naranja y medio limón
- 1 barra de pan
- 3 huevos
- Aceite de girasol
Lo primero de todo, infusionar el vino la noche anterior. Para ello, en una cacerola mezclamos el vino, el agua, las pieles de naranja y limón y la rama de canela, junto con los 200 gr de azúcar. La mezcla se lleva a ebullición durante 4-5 minutos y se deja reposando hasta el día siguiente.
Al día siguiente retiramos de la mezcla, las pieles y la canela. Lo siguiente será cortar el pan en rebanadas de 2-3 cm, una vez cortado reservar.
Batimos los 3 huevos con una cucharada de azúcar. Pasamos las rebanadas de pan primero por la mezcla de vino y despues las pasaremos por el huevo batido. Deben quedar húmedecidas pero no empapadas.
Una vez este listo el pan, en una sartén ponemos a fuego medio el aceite de girasol y cuano este caliente echamos las torrijas, hasta que se doren por ambos lados.
Con el vino que ha sobrado preparamos un almíbar un poco más espeso, echamos un par de cucharadas soperas de azúcar y lo ponemos a cocer a fuego medio durante 15 o 20 minutos hasta que espese.
Dejar reposar 10 minutos, rociar las torrijas y ¡a disfrutar!