Bajan las temperaturas, aparecen las primeras lluvias y ése es solo uno de los primeros signos que nos avisan de que el verano se despide y estamos a las puertas del otoño. El cambio de estación no es solo una fecha en el calendario, sino que nuestros hábitos diarios se ven afectados y hasta nuestro estado de ánimo. Hacemos el cambio de armario y en nuestra despensa aparecen frutas, verduras y legumbres para cocinar menús más elaborados: guisos, platos de cuchara, purés…
Consumir alimentos de temporada es lo ideal para cumplir con las premisas de la compra sostenible. Elegimos productos locales, cultivados de km cero y reducimos la huella de carbono. Además, la existencia de una gran oferta de este tipo de productos, permitirá que los precios se reduzcan.
Si optamos por disfrutar de los productos típicos otoñales, además, estaremos siguiendo las premisas de la dieta mediterránea y beneficiándonos de un estilo de vida saludable que reducirá los niveles de azúcar y colesterol.
Otoño, tiempo de vendimia
El otoño es tiempo de setas, castañas, aguacates, coles, escarolas, calabazas, granadas, membrillos… y de uvas. En el país con más viñedos del mundo, España, la época de la vendimia transforma nuestros campos, nuestros hábitos y hasta nuestra vida social: no hay zona en España que no celebre una fiesta de la Vendimia. En la DO Valdepeñas, donde se elabora la gama Los Molinos, las fiestas de la vendimia y el vino, declaradas de Interés Turístico son un reclamo para los que desean acercarse y aprender sobre la cultura ancestral del vino. No perder el contacto con las raíces y las tradiciones.
La vid, junto con el trigo, y el olivo, es uno de los tres pilares fundamentales de la dieta mediterránea. Y es que si cada día acompañas tu menú diario con una copa de vino Los Molinos ya sea joven (tinto, blanco o rosado) o con crianza/reserva/gran reserva) estarás realizando un hábito saludable. De hecho, desde 2003, es considerado un alimento, según estableció la Ley del Vino debido a que contiene vitaminas, minerales, ácidos, aminoácidos, polifenoles antioxidantes…
El menú otoñal de una dieta mediterránea bien pudiera estar compuesto por un estofado de cordero con castañas y setas de temporada y acompañarlo con una copa de vino Los Molinos Tempranillo. Una combinación deliciosa que nos permite disfrutar de lo mejor de esta época del año a precios asequibles y con un compromiso claro con el medio ambiente.